miércoles, 27 de enero de 2010

la salida

- sabes tengo un idea –
- se puede saber – pregunto
- obvio tontito – dice ella riéndose

Tontito, que se habrá creído la hueca esta, ya le iba a responder una de mis estupideces que siempre respondo cuando me encabrono, pero ella me gano

- después de comer podríamos ir a tomar algunos tragos a otra parte –

Yo pensé de inmediato varias cosas, primero no tenia mucho dinero para ir a tomar tragos quizás donde, segundo no me estaría haciendo una encerrona, tercero quizás es una desquiciada que quiere que le pague la caga de cuenta, o peor aun una cámara indiscreta de alguien que quisiera burlarse, total enemigos tengo muchos. Pero lo siguiente que me dijo me dejo paralelo.

- no lo pienses demasiado, si tu tranca es dinero, no te preocupes yo te invito la comida y los tragos, te parece –
- ok, no problema – acepte sin estar muy convencido de lo que vendría después.

Siguió la velada llegaron los platos de fondo, conversamos de muchos temas, se notaba culta, hablo mucho de literatura, música docta, me dijo que vivía sola en el sector oriente de la capital. Oriente? Me cago, con suerte se que el norte esta arriba en un mapa, espere que oriente fuera no de plaza Italia para abajo. Me contó de la muerte de sus padres, de la muerte de sus hermanos y como había quedado sola en el mundo. Algunos parientes en el extranjero, exiliados del régimen me comento.

Me toco conversar a mí y que creen, que mejor tema que la música destroza cráneos. De todas maneras lo pensé bien antes de conversar, dije si me acepta el tema estamos dados. Así que me largue con la pregunta típica.

- te gusta el rock and roll – quizás debería haber preguntado te gusta el reggeton, pensando en que la mayoría de las mujeres unineuronales escucha eso.
- si, es decir, no soy adicta, pero si escucho a veces, Elvis, Beatles, etc, toda esa onda loca. Y tu que escuchas?-

Onda loca? Bueno será, me largue con el maldito discurso que tengo preparado para que la gente duerma y note en sus ojos que si le interesaba, le hable desde lo que viví el año 1983 hasta ahora, me pregunto cosas muy puntuales que hasta la mas mina “metalera” nunca preguntaría. Como paso el tiempo, no tengo la menor idea.

Terminamos de comer, seguimos conversando, la sobremesa que dice mi madre, fumamos de sus cigarros, ella pidió unos bajativos. Los cuales nuevamente eran de líquido viscoso, le pregunte que era eso, me miro insinuante y me dijo tómatelo confía en mi.

Confía en mí? jajá, como podía decirle que no confiaba en nadie, ni siquiera en mis padres. Pero bueno lo tome y era algo que nunca había probado antes.

Ya había pasado casi una hora cuando ella decide que es tiempo de caminar, a lo cual no me niego, ya que necesitaba como sea rebajar el peso estomacal que tenia. Ella llamo al mozo, le pidió la cuenta. Encendió otro cigarro mientras venia el mozo con la cuenta. Apresuradamente agarre la cuenta, tratando de hacerme el galán y en una de esas me anotaba un punto para mas rato, pero ella en un movimiento casi felino me arrebato la bandejita plateada donde traen el estuche de cuero con la boleta. Saco su tarjeta, pude notar que era dorada, y dejo que el mozo se la llevara para hacer efectivo el pago.

- deberías haberme dejado pagar –
- para que si después me pagaras – dice con su sonrisa coqueta

A este comentario no quise sacarle mas información, llega el mozo nos dice que todo esta sin problemas, así que yo agarro mi chaqueta y ella su abrigo y salimos del local, ella me toma del brazo y empezamos a caminar. Igual no puedo negarlo, pero estaba entusiasmado, parecía cabro chico con juguete nuevo recién abierto, quería puro probarlo. En este caso a la morena que iba acompañándome.

Salimos del local, y nos encaminamos a una de las esquinas, luego doblamos, caminamos media cuadra, mientras tanto conversábamos del clima, de lo helado que estaba, de la lluvia, etc. Cuando agarra su cartera (Gucci) y saca unas llaves, con las cuales desbloquea la alarma de un auto. Un Auto? Realmente era una camioneta, mitsubishi montero, con patente empezada con X. Años que anhelaba poder sentarme en una de esas.

- me la regalo mi ex – me dice
- ehh buen regalo –
- nah, solo quería tenerme contenta, para que no fuera molestar a su esposa-

Que estaba haciendo conmigo en esos momentos entonces, porque no buscaba sus prototipos con dinero a montones. Junte fuerzas para preguntarle que pretendía.

- yo no tengo plata- empecé- solo me doy gustos rara vez, como venir a comer acá, y tu no eres como para estar con alguien así, hueles bien, te mantienen, mira este auto, supongo quieres probar nuevas sensaciones. Quizás estas enojada y quieres sacarte el empacho con el primero que vieras – si fuera así gracias por eso

Ella activo el cierre centralizado, cerró las puertas, me miro, me puso su mano en la pierna, y me dijo….

No hay comentarios:

Publicar un comentario